El objetivo de Chile es que el 70% del consumo de energía provenga de fuentes renovables de aquí al año 2030. Aún más ambicioso es el objetivo que contempla que, para el 2050, se alcance la neutralidad en las emisiones de carbono a la atmósfera.
Sin embargo, en este auge de proyectos fotovoltaicos y eólicos que el país ha experimentado a lo largo de la última década, donde las subestaciones eléctricas han desarrollado un papel fundamental, también se ha vuelto indispensable desarrollar proyectos de plantas de almacenamiento capaces de aprovechar toda la energía generada. En este ámbito, no cabe duda que los transformadores eléctricos seguirán siendo una parte vital en la infraestructura energética.
Volviendo a lo anterior, es que el parlamento chileno aprobó en octubre de 2022 un insigne proyecto de Ley del Almacenamiento de Energía y el Desarrollo de la Movilidad Eléctrica. Y las necesidades no se han hecho esperar. Para satisfacer esta demanda, el país ha destinado 2 mil millones de dólares para subastas de almacenamiento a gran escala.
Esto último convierte a Chile en el segundo país del continente americano en liderar el mercado de almacenamiento energético, solo por detrás de Estados Unidos que en la actualidad alberga hasta un 10GW de almacenamiento.
La clave está en el litio
Chile, junto con Bolivia y Argentina, forman parte del triángulo del litio. Esta zona cuenta con grandes reservas de este material, convirtiéndolo en un factor clave para el desarrollo de centros de almacenamiento sustentables.
Por esta razón es que estos tres países son cada vez más reacios a exportar carbonato de litio como materia prima a economías desarrolladas e industriales como Estados Unidos. Todo con el fin de alcanzar la industrialización mediante energías renovables. En este aspecto, Chile ya ha apostado por almacenar la energía proveniente de las fuentes naturales a base de litio y distribuirla a través de subestaciones eléctricas.
No obstante, recientemente, el presidente Gabriel Boric mantuvo una reunión con el presidente de Estados Unidos con el propósito de colaborar en cuestiones de desarrollo económico, particularmente en la transición verde, con una fuerte inversión en Chile.
Los diferentes proyectos en camino
En la actualidad, Chile cuenta con un total de 85 proyectos de almacenamiento energético, que en su totalidad alcanzaría a generar alrededor de 6,4GW. De estos 85 proyectos, 60 se encuentran en etapa de construcción y planificación con un total en torno a los 4,7 GW. Se estima que para el período 2024-2026, 51 de estos proyectos entrarán en pleno funcionamiento con 3,9 GW de almacenamiento y lo hará a través de sofisticados transformadores de distribución.
En este sentido, emblemáticos son los dos proyectos que ENGIE Chile ha anunciado recientemente y que están ad portas de iniciar su primera fase de operaciones. El primero se trata de la planta BESS Coya, ubicada en la región de Antofagasta y que almacenará la energía de la Planta Solar Coya, la cual entró en operaciones en abril del presente año.
Transformadores CH, a la vanguardia
Las regiones de Antofagasta y Tarapacá, en cuya superficie se encuentra el imponente desierto de Atacama, son las regiones de Chile propicias tanto para la generación como para el almacenamiento energético.
Por eso, desde Transformadores CH, es nuestra misión contribuir de manera justa y consciente hacia la transición verde. A través de la fabricación de transformadores eléctricos, nuestra misión es dejar una huella en este largo pero apasionante camino hacia el futuro sostenible del país.