Como fábrica de transformadores, nos cuesta imaginar que un país líder en energías renovables en la región, con pretensiones de ser un referente a nivel mundial en los próximos años, aún no se haya desarrollado un parque eólico marino, también conocido como ‘parque eólico offshore’.
Esta contradicción se acentúa aún más si tenemos en cuenta los más de 4.000 kilómetros de costa que Chile posee, con zonas donde abundan vientos propicios para materializar proyectos de esta envergadura. Sigue leyendo para conocer más detalles, ¡te esperamos en nuestra fábrica de transformadores en Chile!
Costes y voluntad legislativa
En este ámbito, especialistas afirman que la implementación es complicada debido a diversos factores, entre los que se cuenta la accidentada geografía marina que presenta el país, la inclinación a nivel gubernamental por la energía solar y, sobre todo, el elevado coste que supone la implementación de un parque eólico marino.
Esta implementación incluye el transporte mediante barcos, cables marinos, transformadores pad mounted localizados en tierra, entre otros costos asociados ligados, también, al mantenimiento.
Además, según expertos, desde un punto de vista comercial, la inversión en proyectos onshore resulta más atractiva para empresas extranjeras. Entre otros aspectos, porque los transformadores eléctricos requieren menos esfuerzo a nivel operativo.
Esta inversión inicial podría recuperarse en el séptimo u octavo año de operaciones, en comparación con los proyectos offshore, que requieren aproximadamente diez años para recuperar la inversión.
Este desequilibrio plantea un obstáculo inicial significativo en el ámbito administrativo. Por lo tanto, los principales desafíos para que la energía eólica marina sea una realidad se centran en la inversión y la evaluación del proyecto en términos de regulación y percepción pública.
¿Qué ventaja trae la energía eólica marina?
Además de los beneficios ambientales que ofrece, la energía eólica en alta mar presenta ventajas significativas en comparación con la energía eólica en tierra firme y sus respectivos transformadores pad mounted. Una de estas ventajas es la mayor consistencia y fuerza de los vientos en los campos marinos. Esto se traduce en una mayor durabilidad de las torres eólicas, ya que experimentan menos interrupciones y arranques en comparación con los parques eólicos en tierra.
Desde la inauguración de la ya extinta Vindeby Offshore Wind Farm, el primer parque eólico marino inaugurado en Dinamarca en 1991, ha pasado mucha agua bajo el puente respecto a la generación de energía. Para poner en perspectiva de lo que estamos hablando, si Vindeby a los largo de sus 25 años de existencia fue capaz de generar un total de 243 GWh de energía con 11 turbinas en funcionamiento, en la actualidad, los 7 aerogeneradores más grandes del mundo son capaces de generar la misma cantidad de energía en tan solo un año.
En Transformadores CH, el compromiso es primordial
Estos avances en la generación eólica marina han aumentado la demanda de componentes clave, como los transformadores eléctricos, en todos los países en los cuáles se ha implementado. En este contexto, como fábrica de transformadores en Chile abogamos por una agilidad a nivel legislativo que pueda llevarnos a la transición verde en el mediano plazo. Este sería un paso esencial para satisfacer esta creciente demanda y encaminar a Chile hacia el liderazgo en energías renovables.
Como dato final, en la actualidad se termina de construir el mayor parque de energía eólica marina. El Dogger Bank, frente a las costas de Reino Unido, cuyas 277 turbinas serán capaces de generar 3,6 GW en tan solo unos días. Esta capacidad es suficiente para llevar energía a 6 millones de hogares al año.